Gestión de Residuos Peligrosos
¿Qué son los residuos
peligrosos?
Los residuos peligrosos, llamados RP, son aquellos que constituyen un riesgo para nuestra salud o para el medio ambiente y que hayan sido calificados como residuo peligroso por las Administraciones Competentes.
En Yainfe, dada la creciente generación de residuos peligrosos contenidos en los Aparatos Eléctricos o Electrónicos, debido a una economía industrial en constante desarrollo, tenemos como objetivo el tratamiento, la eliminación y valoración de esos RP, respetando el medio ambiente, minimizando riesgos y velando por la salud y seguridad del ecosistema en el que vivimos.
Que hacemos
Transportamos y almacenamos los residuos, llevamos un exhaustivo control de la trazabilidad de los mismos, cumpliendo con la legislación medioambiental aplicable y generando toda la documentación que marca la legislación actual.
La gestión de residuos peligrosos tiene algunas complicaciones. Los desechos que debemos manejar pueden resultar dañinos para el ser humano con solo tocarlos.
Ante esta realidad, los profesionales debemos actuar con precaución para conseguir un tratamiento final seguro. De lo contrario, los daños causados a la salud humana y el medio ambiente podrían ser altos o irreparables.
Todos los residuos son gestionados conforme a la normativa vigente.
Clasificación
Para facilitar su tratamiento, los residuos peligrosos se pueden clasificar de diversas formaqs según la normativa que estemos considerando, pero una clasificación general de los principales RP que podemos encontrar, es la siguiente:
Pueden causar daño tanto a los seres humanos como al medio ambiente por exposición directa.
Estos residuos son susceptibles de emitir llamar de forma espontánea, lo cual sucede por múltiples razones que dependen del material a tratar.
El contacto físico con el material causa quemaduras o erosiones. Afectan con suma gravedad al medio ambiente.
De no tratarlos, el efecto que provocan entre seres humanos y medio ambiente será permanente.
Su química es inestable, por lo que reaccionarán de forma violenta ante cambios en su entorno.
Son residuos especiales que requieren de un tratamiento específico. Los generan las centrales nucleares, pero también los hospitales y algunos aparatos de medición.
Estos restos contienen patógenos como bacterias, parásitos, virus y hongos. Su concentración es tan alta que resulta peligrosa para las personas o los animales.
A la hora de gestionarlos, los residuos peligrosos se etiquetan y almacenan en función de sus características. Si es posible eliminarlos, se procede con las máximas precauciones. Un error, como una filtración, podría tener consecuencias graves. Para llevar a cabo estos procesos, se ha de contar con profesionales cualificados y con experiencia en cada fase del proceso y su tratamiento. Algunos residuos pueden permanecer activos durante décadas.
En definitiva, la gestión de residuos peligrosos debe atender a las características de estos restos.
En nuestras manos está una parte significativa del mantenimiento del medio ambiente y la seguridad de las personas.